Es habitual encontrar los conceptos de vivero de empresas e incubadora de empresas utilizados indistintamente, como si se tratase de un solo ítem. Sin embargo, es importante entender que se trata de dos formas de ayuda al emprendimiento distintas.
En este artículo, analizamos en qué consisten y cuál puede ser más conveniente en función del tipo de negocio que estamos emprendiendo.
¿Qué es un vivero de empresas?
Un vivero de empresas es una estructura que puede estar impulsada por instituciones tanto públicas como privadas y que tiene como finalidad servir como apoyo a las empresas de nueva creación durante sus primeras fases de desarrollo.
Los viveros ponen a disposición del emprendedor una serie de ayudas, entre las que destacan los espacios de coworking, el asesoramiento durante las primeras fases de la actividad, la formación, el networking, etc.
¿Qué es una incubadora de empresas?
Por otro lado, las incubadoras de empresas son algo parecido a un holding de empresas tecnológicas. En esta solución, que también está destinada a ayudar a empresas de nueva creación, un grupo de inversores se hace cargo financieramente de los emprendimientos que incuba.
En la incubadora de empresas no necesariamente existe un espacio físico común, pero sí un asesoramiento, unos recursos y un grupo de inversión comunes.
¿Cuál es la mejor opción para emprender?
Para saber cuál es la mejor opción dependiendo del tipo de negocio, es importante conocer las diferencias entre una y otra:
Las incubadoras, generalmente, están impulsadas de manera privada, mientras que en los viveros es más frecuente la iniciativa pública.
Las incubadoras pueden tomar una idea desde sus inicios, mucho antes de que se haya convertido en una realidad. Desde su fase inicial, la incubadora puede ejercer sus acciones de ayuda al emprendedor. En cambio, los viveros han sido pensados para proyectos que ya han superado la fase de creación.
Por último, mientras que la incubadora ha sido impulsada para ofrecer un apoyo financiero, el vivero ayuda a las empresas en otras necesidades como el asesoramiento o los espacios físicos de trabajo.
En definitiva, elegir una u otra opción depende de:
- La fase en que se encuentra el proyecto: si todavía estamos en el pre-inicio o si es un negocio que ya ha comenzado.
- El tipo de proyecto y sus necesidades.
En nuestra provincia, donde Internet se ha convertido en uno de los mayores impulsores del emprendimiento y la tecnología cada vez es más importante para los negocios, se puede sacar gran partido de las ayudas ofrecidas por las incubadoras y los viveros de empresas.
En la Cámara de Comercio de Castellón contamos con el Vivero de Empresas de Vila-real para ayudar a tu empresa en sus primeros pasos.
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